Un fin de semana entre
amigos, naturaleza y mucha fotografía
Vega de Liébana nos recibió con sus
verdes montañas, praderas salpicadas de flores amarillas, arroyos cantarines y
un aire puro que oxigenaba cuerpo y alma. Un paraíso escondido en Cantabria,
donde la belleza del entorno no necesita filtros ni retoques.
Allí, en el acogedor “Albergue de
Villaverde”, propiedad de nuestro amigo Javi, celebramos del 16 al 18 de mayo
el “III Reencuentro Fotográfico de antiguos alumnos de la Escuela Cántabra de
Fotografía de Naturaleza”. Una cita que, como en anteriores ediciones, fue
mucho más que fotografía: fue reencuentro, aprendizaje, aventura y emoción.
Viernes; Llegadas y reencuentros.
Tal y como estaba previsto, los
asistentes comenzamos a llegar al albergue por la tarde. Nos acomodamos en
nuestras habitaciones y, entre saludos y abrazos, nos fuimos acomodando. Una
vez instalados, pasamos un buen rato de animada charla hasta la hora de la
cena.
Después de cenar, nos reunimos en el
salón para ver una proyección de fotografías realizadas en los distintos
talleres que la escuela celebró entre 2009 y 2015. Luego, escuchamos las
propuestas de los asistentes y dimos forma al plan del fin de semana. Lo
primero que decidimos: madrugar para recibir el amanecer en el Collado de
Llesba.
Sábado; Naturaleza, técnica y
aventura.
Los despertadores sonaron a las 5:30.
Una hora después ya estábamos en lo alto del puerto de San Glorio, esperando la
llegada del nuevo día. La vista de los Picos de Europa desde ese otero es
sobrecogedora. Además, alguno vivió una experiencia inolvidable al toparse con
un oso a escasos metros. Al grito de "¡un oso, un oso!", fuimos
corriendo a ver si lográbamos divisarlo. Afortunadamente, el animal fue más
sensato que nosotros y rehusó el encuentro. Lo bautizamos como “BuBu”, y se
convirtió en el centro de conversación durante toda la mañana.
A la llegada del albergue, nos
esperaba un excelente desayuno reparador. Después, sin perder tiempo, nos
dirigimos al precioso pueblo de Ledantes. allí, junto al “Arroyo de la Viña”,
aprovechando el frescor y la sombra de sus orillas, el sol comenzaba a apretar,
nos pusimos manos a la obra con los equipos para practicar la fotografía macro.
Intercambiamos ideas, trucos y “cacharrería” para captar los detalles de ese
pequeño mundo que habita pegado al suelo.
A las 13:30 regresamos al albergue
para asearnos y tomar un refrigerio antes de la comida. Tras esta, algunos
aprovecharon para echar una siesta, mientras que otros decidieron seguir en
marcha, cambiaron el equipo fotográfico, por los arneses y cascos, poniendo
rumbo al “Mirador de Peñallana” para realizar la “Vía Ferrata de Socastillo”,
gracias a las espectaculares imágenes grabadas por nuestro socio Sergio Marcos
(@sergiomarcos77), pudimos ver el recorrido completo que realizaron nuestros/as
intrépidos/as compañeros/as.
A las 17:30 comenzó la primera
sesión teórica, a cargo de Nacho Alonso (@geekycaptures), centrada en la
técnica de apilamiento de enfoque (focus stacking). Vimos cómo obtener
imágenes con gran profundidad de campo combinando varias tomas con distintos
planos de enfoque. Nos explicó los principales programas que el empleaba,
“Adobe Photoshop” y “Helicon Focus”, nos mostró su manera de cargar las
imágenes, los diferentes modos de apilarlas en “Helicon” y algunas
consideraciones sobre tiempos de carga, alineamiento de archivos y en que
situaciones puede funcionar mejor cada programa. Se habló también del modo
automático de Focus Bracketing que algunos modelos de cámaras tienen
implementados en la actualidad.

Tras un breve receso, toco el turno a
Juanjo Herrero (@juan.jose.herrerogarcia), que nos ofreció una interesante charla sobre sus dos viajes fotográficos a Dolomitas, mostrándonos detalladas planificaciones de
localizaciones, zonas donde aparcar y acampar, precios de estos y horarios,
etc, contó con el apoyo de David Izaguirre, también conocedor de la zona, que
aportó su experiencia como montañero, hablando del nivel de dificultad de
algunas rutas, algunas asequibles para gente menos experimentada. Tras la charla,
Juanjo proyectó dos audiovisuales con magnificas fotos suyas: uno sobre los Dolomitas
y otro con imágenes de Cantabria, recordándonos que no hace falta viajar lejos
para encontrar lugares espectaculares donde habitamos.
A continuación, otra super cena, y es
que esto de la fotografía da un hambre…
Con los estómagos llenos, volvimos al
salón, esta vez el voluntario era Pete Sánchez (@petesanchezfoto), que nos habló y mostró dos proyectos fotográficos muy interesantes,
el primero la “Serie LE”, una serie de fotografías de larga exposición
tomadas con la luz del día, que desarrollo entre los años 2014-2016, en
espacios muy reconocibles de la costa y bahía de Santander y la Costa Quebrada,
fundamentalmente, y en la que empleo trípode y filtros de densidad neutra y
polarizadores para conseguir en ellas, esa sensación de calma y surrealismo que
caracterizan a las largas exposiciones en fotografía.
A continuación, mostro el “Proyecto Badlands”,
un proyecto inacabado, realizado durante un recorrido por el desierto de
Tabernas, Almería, fotografiando las formaciones denominadas badlands: Áreas
geográficas caracterizadas por un terreno extremadamente erosionado y
accidentado, generalmente con poca vegetación. Suelen estar compuestas de rocas
sedimentarias y suelos blandos, lo
que facilita la erosión causada por el agua y el viento. Este proceso erosivo
crea formaciones únicas como cañones, barrancos, colinas y mesetas, creando un
impresionante paisaje. Para este proyecto cargo con poco equipo, Cámara
mirrorless, formato 4:3 con ópticas fijas manuales de 25 y 35mm.
Para terminar la jornada, salida
nocturna, de la mano de David Izaguirre (@dizapala), que nos
introdujo a la astrofotografía con Smart Telescopes, dispositivos sencillos, eficaces y asequibles. Nos habló
de planificación astronómica, localización de objetos celestes con aplicaciones
como Stellarium, y técnicas de enfoque con máscara de Bahtinov, nos mostró un
par de ejemplos para conocer su funcionamiento y puso a trabajar su telescopio.
Nos surgieron dudas de toda índole,
desde temas técnicos a temas astronómicos que David intento resolver sobre el
terreno.
Al final pasamos un buen rato disfrutando
de una gran noche estrellada, se creó un ambiente muy agradable.
Domingo; Etnografía y despedidas.
El domingo fue más relajado. Tras
desayunar, compartimos una animada charla comentando lo vivido el día anterior,
mientras algunos nos mostraban sus nuevas adquisiciones, cámaras, objetivos,
luces led, etc… a las 12:30, partimos hacia Enterrías para visitar la “Casa
de las Doñas”, un museo etnográfico clave para entender la arquitectura
popular y la vida campesina desde el siglo XIX hasta mediados del XX. La
visita, guiada por Paco Gutiérrez, fue un auténtico viaje en el tiempo:
revivimos las vivencias, costumbres y entorno de quienes habitaron esa casa, un
lugar digno de ser conocido.
De vuelta al albergue, una deliciosa
comida puso el broche final al encuentro, no sin antes hacernos la tradicional
foto de familia. Las despedidas y el deseo de volver a vernos pronto nos
llevaron de regreso a nuestros coches, cargados de equipaje y de una
experiencia que, sin duda, recordaremos durante mucho tiempo.
Para finalizar este resumen,
solo nos queda agradecer a Javi y su equipo, Dani y Dayanna, todo su esfuerzo y
dedicación para hacernos sentir como en casa. Y por supuesto, también a todos
los asistentes, por su implicación y buena disposición a que un fin de semana
cualquiera, se convirtiera en una experiencia inolvidable.
¡Sin duda, volveremos a
reencontrarnos en Liébana!